Si bien es cierto que todavía no se puede dar por finalizada la temporada turística de verano --desde el sector recuerdan que septiembre es la época elegida por muchas personas para pasar sus vacaciones--, con el fin del mes de agosto llega tradicionalmente el momento para hacer balance de lo que ha sido la campaña de sol y playa en la provincia. Y los resultados no pueden ser más satisfactorios, teniendo en cuenta la coyuntura, ya que se ha mejorado la campaña del año pasado pese a que las perspectivas no eran las más halagüeñas.

Lo confirman todas las fuentes consultadas por Mediterráneo, que hablan de un incremento tanto del visitante nacional como del internacional. El sector ha logrado pues uno de sus objetivos, que no era otro que fidelizar al turista español, ante el empuje de otros destinos.

Desde el Patronato de Turismo hablan de una ocupación hotelera que en el mes de agosto rondó el 92%, tras el 87% en julio, lo que significa unos «mejores resultados que en el 2018», que, además, «son superiores a las previsiones iniciales del sector».

territorio atractivo // Para la diputada provincial del área, Virginia Martí, esto «certifica que tanto el litoral como el interior de nuestras comarcas siguen siendo atractivas para el visitante, que valora de forma positiva la calidad de nuestras playas y la variedad cultural y medioambiental del interior provincial».

Las estadísticas de la patronal provincial, Ashotur, también muestran un verano «que ha sido un poco mejor que el del 2018», según indica su gerente, Luis Martí, aunque está lejos del 2017, que «fue algo excepcional», ya que Castellón se benefició de la inestabilidad política de países como Turquía o Egipto.

Un alto nivel de ocupación que no solo se registró en el litoral de la provincia. Las cifras también han sido buenas en el interior. Desde el Patronato hablan de picos de ocupación que «han rozado el 90 por ciento en algunos destinos». Alexis de Pablo, presidente de la asociación hotelera Altur, pone el foco sobre Montanejos, «donde se están haciendo las cosas muy bien y que ya tuvo un muy buen mes de junio».

MAL JULIO, BUEN AGOSTO // Una de las modalidades alojativas más demandadas durante el verano es el cámping y los de Castellón han vivido una buena temporada, tal y como explica el presidente de la asociación que los agrupa, José María López. «El mes de julio la ocupación descendió entre un 5% y un 7% respecto al año anterior, en lo que tiene mucho que ver el bajón del FIB. Sin embargo, en agosto se superaron las mejores expectativas y compensó de sobra el descenso del mes anterior», indica López.

Queda todavía todo el mes de septiembre, que podría influir en una peor campaña turística de registrarse poca ocupación; pero no parece que vaya a darse esta circunstancia. En el Patronato apuntan a una ocupación que puede acercarse al 80% en la zona litoral, «con especial incidencia los fines de semana». El gerente de Ashotur, no obstante, apunta un factor importante: «El tiempo que vaya a hacer será decisivo, más teniendo en cuenta que muchas reservas se hacen a última hora. Pero de no mediar ningún problema, las expectativas de llegada de turistas son buenas».

En el acumulado hasta mayo de 2019, detallan desde Diputación, visitaron Castellón 566.359 viajeros, que realizaron un total de 2.119.998 pernoctaciones. Respecto al mismo periodo del 2018 aumentaron el número de visitantes en un 2,96%, y las estancias en un 4,39%.