Durante el primer trimestre del 2019, el Ayuntamiento de Castellón impulsará una segunda fase de exhumaciones de víctimas de la represión franquista en el cementerio de San José, con las que se quiere dar respuesta a la demanda de una quincena de familias, trasladada al Grup per la Recerca de la Memòria Histórica de Castelló. Para ello, el consistorio destinará unos 15.000 euros para los trabajos arqueológicos, según avanzó ayer la concejala de Cultura, Verònica Ruiz, quien demanda más «implicación y ayudas del Gobierno y de la Generalitat». El anuncio de nuevas exhumaciones se hizo en el balance de la primera fase, en la que se han desenterrado 13 cuerpos de represaliados, cuyos restos trasladará hoy mismo el equipo de ArqueoAntro dirigido por Miguel Mezquida a la Universidad Complutense de Madrid, donde será cotejado el ADN y realizados los estudios antropológicos.

Por otra parte, Ruiz valoró las medidas cautelares presentadas por Abogados Cristianos contra la retirada de la Cruz de los Caídos del Ribalta, diciendo que eran «esperables», pero no tiene miedo de nada, «porque es un monumento fascista, no cristiano».