Hace ahora 32 años la DGT creaba su eslogan Lo importante es llegar con el objetivo de que los conductores no excedieran los límites de velocidad y lograr, así, un descenso en la siniestralidad vial. Pese a la gran cantidad de acciones formativas impulsadas, programas por puntos y campañas de concienciación --cada vez más directas y crudas-- parece que el mensaje no cala en la provincia, donde el pasado año se pusieron 56.544 multas (154 cada día) por sobrepasar la velocidad estipulada. Fueron mil más que un año antes, según datos de la Jefatura Provincial de Tráfico.

La respuesta hay que buscarla, entre otros factores, en la norma que fijó recientemente en 90 km/h la máxima permitida en carreteras convencionales. La misma afectó, por ejemplo, a la nacional 340, así como a la 232 o la 225.

El aumento de este tipo de sanciones se veía venir ya desde mediados del pasado año. Y es que, como publicara este periódico, al término del primer semestre eran prácticamente el doble que en el 2018 --pasaron de 14.887 a nada menos que 28.961--.

Desde la DGT inciden en que el exceso de velocidad es, junto con las distracciones y el consumo de alcohol y drogas, el factor de mayor riesgo. Pisar el acelerador es el elemento fundamental que determina la gravedad de los accidentes de tráfico y el alcance de las lesiones de las víctimas.

CASOS DESTACADOS / Sobrepasar los límites y poner en riesgo al resto de usuarios de la vía no queda impune. Cabe recordar que en Vilanova d’Alcolea un conductor de 23 años, natural de Benicarló, fue sorprendido a 181 km/h en un tramo limitado a 80 de la CV-13. Sucedió en el 2017 y el destacamento de Tráfico de la Guardia Civil buscó al dueño del vehículo y lo llevó ante el juez por un delito contra la seguridad vial. Asimismo, a finales del año 2016, la Policía Local de Castelló denunció a otro hombre de 27 años por circular a 124 km/h en una zona del casco urbano en la que la velocidad máxima era 40.

Según el exhaustivo estudio El porqué de los radares: efectividad de los radares como medida de control de velocidad de la Universidad de Valencia, «la velocidad excesiva reduce el tiempo de reacción, dificulta el control del vehículo y la rectificación de la trayectoria».

ALCOHOL Y DROGAS / Más positivos fueron el pasado año en la provincia las cifras de sanciones por presencia de alcohol y drogas. En 2019 se interpusieron un total de 1.017, frente a las 1.535 del ejercicio anterior (un 33% menos).