Ser un cazador de Pokémon tiene sus riesgos. Y, si no, que se lo pregunten a un joven que sufrió un atraco en la capital de la Plana mientras estaba enfrascado en el popular juego, que se ha convertido en un fenómeno mundial.

Los hechos se produjeron sobre las cinco y media de la madrugada, cuando los agentes del Cuerpo Nacional de Policía de Castellón fueron alertados a través de la sala 091 para que acudiesen al aparcamiento de un centro comercial, donde se había producido un robo, en las inmediaciones de la Ciudad del Transporte. Al parecer, la víctima se encontraba junto a su coche, jugando al conocido juego con el móvil, sin percatarse que se le acercaban los dos jóvenes. Estos últimos, al llegar a su altura, le pidieron tabaco y un euro. Él se negó, tras lo cual uno de ellos le dio un empujón ordenándole que le entregara todo lo que tuviera. Mientras intentaba huir, recibió una fuerte patada por la espalda, logrando aun así llegar hasta una gasolinera que estaba próxima, donde le auxiliaron y avisaron al 091.

La inmediata respuesta policial permitió detener a los presuntos autores, del grupo San Lorenzo, cuando intentaban escapar. Con el cierre del perímetro, los agentes localizaron a los dos jóvenes mientras huían. Los policías, tras realizar las comprobaciones necesarias, detuvieron a los jóvenes como presuntos autores de un delito de robo con violencia. Se trata de dos ciudadanos españoles de 21 y 23 años.

Con la llegada del Pokémon Go, millones de personas en todo el mundo se han convertido en entrenadores Pokémon. Pero la fiebre por capturar a estos monstruos de bolsillo puede pasar de ser un pasatiempo lúdico a convertirse en un problema. Por ello las fuerzas de seguridad de todo el mundo se han lanzado a dar consejos para evitar ser víctima de un robo o atraco o sufrir un accidente de tráfico. Y es que los amigos de lo ajeno pueden aprovechar la distracción para robar el smartphone o algo peor. Por ello, se aconseja evitar ir a lugares oscuros, solitarios o alejados y no descuidar el móvil. Incluso se recomienda hacer caso omiso de los consejos que aparecen en las redes sociales sobre ubicación de pokémons, pues los delincuentes han llegado a usarlos como señuelos para cometer sus fechorías. H