El Chato Gastrobar de Artana es el mejor Arrocito de Castellón. Lo dice el experto jurado de chefs y cocineros con soles Repsol y Estrella Michelín capitaneados por Miguel Barrera, de Ca'l Paradís, en el concurso por el que han pasado hasta 20 paellas en la carpa instalada en el Paseo Buenavista del Grao. Detrás de los castellonenses, los valencianos de Cullera de La Mar Salà; y, desde Argamasilla de Calatrava, en Ciudad Real, los chefs de Los Arroces de Guilermo, de entre 20 participantes, en una iniciativa del Patronat Municipal de Turisme para sumar gastronomía y turismo.

Esta primera edición, el concurso internacional ‘Arrocito de Castelló’ se enmarca dentro de la estrategia del Patronato de Turismo de promocionar la gastronomía como elemento de dinamización turística, económica y cultural. Está dirigido a todos los profesionales del sector, ya sean nacionales o extranjeros, siempre y cuando se presenten bajo la representación de una empresa o entidad vinculada a la gastronomía.

¿Cómo debía hacerse el arroz? Los 20 participantes, junto a sus ayudantes de cocina, han elaborado 10 raciones para que el jurado las deguste. Las condiciones son sencillas: el plato deberá elaborarse a leña y siguiendo la receta del afamado chef Miguel Barrera, que contiene aceite de oliva virgen extra, tomate, ajos, alcachofas, sepionet de punxa, langostinos de Castelló, rape, fumet y arroz.