La propagación disparada del coronavirus en la Comunitat deja ya poco margen de maniobra y aboca a la autonomía a un «semiconfinamiento» con graves efectos económicos para intentar frenar el virus que empieza a tensionar el sistema sanitario. La Generalitat decidió ayer dar un paso más a las limitaciones planteadas el pasado día 7 y decretó el cierre total de la hostelería y la clausura de los comercios a las 18.00 horas, salvo en el caso de las tiendas de alimentación, farmacias y otras consideradas esenciales. Estas restricciones entrarán en vigor mañana, 21 de enero, a las 00.00 horas y permanecerán vigentes durante 14 días.

Así lo explicó el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, tras la reunión de la comisión interdepartamental para la prevención y actualización frente al covid-19 que se adelantó a ayer dada la «gravedad» de la crisis sanitaria, ya que estaba prevista el jueves, para analizar los últimos datos y estudiar la posibilidad de aplicar nuevas medidas.

Comida para llevar

Entre las nuevas restricciones, figura el cierre de la hostelería, que hasta el momento abría hasta las 17.00 horas. Solo se permitirá servir comida para llevar, ya sea distribuida desde el local o a través de repartidores. En el caso de las cafeterías y hostelería ubicada en los hoteles, solo podrán servir a los huéspedes de los mismos, en las mismas condiciones de aforo que estaba vigentes.

Del mismo modo, la Generalitat acordó el cierre de los comercios a las 18.00 horas y la clausura de todas las instalaciones deportivas salvo para el uso de profesionales y competiciones oficiales de carácter estatal.

El cierre también afecta a salas de juego, bingos, casinos y locales festivos, como peñas, collas, gaiatas o fallas, así como a los espacios recreativos de mayores, los hogares de jubilados, las ludotecas y centros de ocio juvenil.

Tras la detección de brotes e gran magnitud, el aforo en las zonas comunes de las residencias universitarias queda reducido al 30 %, incluyendo los comedores -donde se establecerán turnos-, y se prohíben las visitas.

En los velatorios u otro tipo de actos sociales similares se limita la reunión de personas a 15 si se celebran al aire libre y a 10 si son en espacios cerrados.

Toque de queda

Asimismo, el jefe del Consell avanzó que la Generalitat solicitará este miércoles, en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, que se permita avanzar el toque de queda a las 20.00 horas. Si, finalmente, el Gobierno ante la presión de las comunidades autoriza esta medida, la Comunitat adelantará la restricción a esa hora. De momento, continúa a las 22.00 horas. Y es que, cada vez son más las regiones que reclaman al Ejecutivo de Sánchez poder flexibilizar el toque de queda para que entré antes en vigor. El objetivo del Consell es que durara diez horas, desde las 20.00 a las 06.00 horas.

Dos medidas que continúan en vigor son el cierre perimetral de la región y la limitación de seis personas en las reuniones sociales.

Puig reconoció que estas restricciones se han tomado con «preocupación por sus efectos» y se intentará «compensar a los más perjudicados». A nivel económico, el presidente remarcó que el plan Resiste anunciado el lunes «servirá para ayudar a la hostelería y el resto de sectores afectados como «el más importante de España, el más dotado y el más ambicioso», «El nivel de estrés hospitalario y el aumento de a curva de contagios nos obliga a hacerlo», lamentó.