Ciudadanos ha elegido a Julián Palacios como nuevo miembro del Consejo General del partido a nivel nacional y releva así a la secretaria de Organización de Castellón, Sandra Julià, y su sector afín del principal órgano de decisión de la formación.

Palacios será ahora el único representante en el mismo de toda la provincia, según los resultados de la quinta asamblea general de la formación, que tuvo lugar este domingo tras verse aplazada el pasado 14 de marzo por la crisis sanitaria del coronavirus.

La lista impulsada por Inés Arrimadas resultó la más votada y aportó los 125 electos que formarán el consejo en una votación que contó con una participación del 90% del censo. Además, acompañarán a Palacios otros 16 representantes de toda la Comunitat Valenciana --12 integrantes de la candidatura y cuatro natos-- afines a Arrimadas; y también, a la dirección autonómica, encabezada por Toni Cantó.

Discrepancias internas

Este relevo confirma las diferencias que existen sobre la labor que realiza Julià al frente del partido. Y es que ya ha sido cuestionada en anteriores ocasiones, como en las últimas elecciones municipales, cuando el hasta entonces candidato oficial en Castelló, Jesús Merino, junto a su lista presentaron la renuncia el día límite del plazo para presentar candidaturas, dejando paso a Alejandro Marín-Buck --del entorno de Julià-- como alcaldable, lo que llevó al equipo de Merino a presentar incluso querellas contra la propia secretaria provincial de Organización por un supuesto delito contra la ley electoral al impedir la presentación de una lista.

Esta situación también se extendió a las agrupaciones de otras localidades, como es el caso de Burriana, y provocó la crítica de gran parte de ellas. No obstante, lejos de calmar los ánimos la convocatoria de comicios generales del 10 de noviembre volvió a reavivar las tensiones internas entre los naranjas. Miembros como los vila-realenses Domingo Vicent y César Arzo se negaron a integrar las candidaturas por discrepancias de nuevo con Julià.

El nombramiento de Palacios pone por tanto sobre la mesa el distanciamiento entre la actual dirigente con la dirección autonómica y nacional. Un paso que podría ser el primero ante un próximo proceso de renovación interna en Castellón.