El portavoz de Ciudadanos en Castelló, Alejandro Marín-Buck, calificó ayer de «caciques» a los responsables del gobierno local porque «con su actitud de ordeno y mando quieren convertir el món de la festa y sus festeros en su feudo», aseguró, para después añadir que «en menos de quince días han habido dos crisis».

En primer lugar, señaló la controversia por la votación de las reinas y las damas. Elección en la que «los grupos municipales no pudimos participar por no estar constituido el Patronat de Festes» y denunció que si que lo hicieron las ediles Pilar Escuder y Verónica Ruiz (presidenta y vicepresidenta del Patronat). Y señaló la «prohibición a las reinas de hacer su ofrenda a las representantes de San Agustín», lamentando que «las improvisaciones» del pacto de Fadrell empañen a la festa.