La comisión de seguimiento del Acord de Fadrell que se creó el pasado mes de enero y de la que forman parte representantes de los grupos de gobierno municipales así como de las direcciones de cada uno de los partidos mantuvo ayer la primera reunión desde que comenzó la pandemia del covid-19, hace ahora casi dos meses. Un encuentro que, a pesar de prolongarse durante cuatro horas, no arrojó resultados de importancia y los miembros de la misma se limitaron a afirmar, a través de un breve comunicado, que durante la reunión analizaron «cómo abordar la crisis social y económica que está golpeando a nuestra ciudad».

Además, destacaron que hoy continuarán, en el seno de la junta de gobierno local, con esa misma línea de trabajo, con la intención de «tener plasmado un plan de choque social cuanto antes en un nuevo proyecto de presupuestos».

BALANCE // No obstante, este diario ha podido saber que en el encuentro (desarrollado de forma virtual) realizaron un balance de todo lo que ha sido propuesto por el equipo de gobierno para hacer frente al coronavirus como, por ejemplo, el plan de inversiones en obras menores y la nueva instrucción al respecto para pymes y autónomos, el plan Castelló Verde, las ayudas de cultura, la reforma de las viviendas sociales y el refuerzo en servicios sociales, sin mayores concreciones.

FINALIDAD // Dicha comisión es un órgano político de debate con el fin de derimir las diferencias que puedan surgir en el seno del Acord de Fadrell, como ya sucedió en la crisis sobre las fiestas el pasado año, pero en ningún caso tiene potestad para aprobar ninguna medida. Fue precisamente esta situación provocada por el voto en contra de la eliminación de la Junta de Festes en el consell rector de la concejala de Compromís, Vero Ruiz, la que provocó la creación de este ente.