La Diputación de Castellón sigue dando pasos firmes y decididos en la hoja de ruta marcada por Javier Moliner a la hora de convertir la institución provincial en un referente de transparencia y buen gobierno. Para ello, en la última sesión plenaria se ha aprobado por unanimidad la composición de la Comisión de Ética Institucional, en una apuesta por impulsar un nuevo modelo de gestión basado en la rendición de cuentas diaria y la ejemplaridad en la gestión pública.

Y se hizo, tal y como ha destacado el diputado de Transparencia y presidente de la nueva comisión, Luis Martínez, «desde la necesaria unanimidad» de todos los grupos políticos con representación en la corporación. «La transparencia es algo transversal a toda la administración, por lo que siempre buscamos el consenso. Era necesario que esta comisión empezara, desde el diálogo sincero, con la mayor de las legitimidades y el mayor de los consensos que le confiere la unanimidad», ha destacado.

La nueva comisión estará integrada por 15 representantes políticos de todos los grupos y «con su creación se convierte en un nuevo paso al frente de esta institución a la hora de crear un Modelo de Integridad Institucional que sirva de guía no solo para los políticos sino para todos sus trabajadores públicos». H