El portavoz de Compromís en el Senado, Carles Mulet, presentó ayer de manera telemática una petición a la Fiscalía General del Estado para que estudie y valore si las declaraciones hechas en Facebook por el portavoz del PP en Càlig, dirigidas a Arran el Sénia, pueden ser constitutivas de dos delitos de odio de acuerdo a lo tipificado en el artículo 510.1 y 510.2 del Código Penal: la humillación y trivialización del asesinato de Agulló o de incitación directa de odio y violencia contra la gente de Arran, y la posterior justificación. Además, Carles Mulet destacó que la falta de una condena clara y contundente por parte del PP de la Comunitat Valenciana --así como la ausencia total de medidas contra su portavoz en Càlig--, lo sitúa fuera del sistema democrático. El portavoz municipal del Partido Popular, Óscar Robles Collell, afirmó en las redes sociales que deseaba a Arran que siguieran «el mismo camino que Guillem Agulló --joven asesinado en Montanejos--».

Por otra parte, la alcaldesa de Càlig, Ernestina Borràs (PSPV-PSOE, denunció ayer a través de su perfil de Facebook las «difamaciones» que está sufriendo «desde hace tres años» por parte de Robles en las redes sociales. Como ejemplo, la primera edila socialista aporta «uno de los muchos regalos» que ha recibido del concejal popular, un diploma que le hizo llegar por correo certificado directamente al Ayuntamiento en enero del 2017 y en el que le concedía «el premio» de ser la «reina de la carretera» por sus «escarceos en la autopista».

Borràs explicó que con el comentario que hizo amenazando a los jóvenes de la organización Arran el Sénia, Robles Collell «se ha extralimitado», pero «esta es la forma habitual que tiene de actuar», añadió la alcaldesa de Càlig, quien ya mostró su malestar a este diario días atrás.