El Gobierno de la Generalitat dio ayer su visto bueno al nuevo fondo de cooperación local que, en colaboración con la Diputación de Castellón, inyectará este año 17,8 millones de euros a los pueblos de la provincia, desde una premisa de dotar de más autonomía a los municipios, ya que la aportaciones económica no está sujeta a un fin predeterminado, sino que las corporaciones podrán destinar el dinero a las actuaciones que consideren.

La vicepresidenta del Gobierno valenciano, Mónica Oltra, reiteró tras el pleno del Consell que el plan potencia la autonomía real de los municipios y los dota de recursos suficientes, teniendo en cuenta su importancia en la prestación de servicios públicos esenciales. «Se podrá planificar y atender mejor las necesidades de las personas», según Oltra, que destacó que los municipios son las administraciones más próximas a la ciudadanía. El nuevo fondo estará dotado de un total de 130 millones de euros en el conjunto de la Comunitat, con la colaboración de las diputaciones, salvo en el caso de Alicante, que no se ha adherido a este programa.

Oltra añadió que esta aportación económica global se estructura en tres partes: el propio fondo de cooperación municipal incondicionado; las líneas de participación en los fondos europeos; y otras de financiación para proyectos municipales, que llegarán de la mano del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF).