Combatir la despoblación es uno de los ejes centrales de las nuevas políticas del Consell y de la Diputación para esta legislatura y para ello crearán sinergias para impulsar una estrategia común que frene el vaciado del interior de Castellón. En ello, la dirección general contra la despoblación, jugará un papel primordial. Los presidentes de la Generalitat, Ximo Puig, y de la Diputación, José Martí, así lo reconocieron ayer en Burriana, tras una reunión con alcaldes de la Plana Baixa. Puig anunció que el nuevo departamento autonómico estará radicado en un principio en la Casa dels Caragols, si bien no descartó que, «posteriormente, en función de la dimensión, veremos dónde puede estar, utilizando inmuebles de la Generalitat». Preguntado sobre si será la alcaldesa de Sant Mateu y diputada socialista, Ana Besalduch, su titular, ni afirmó ni desmintió, diciendo que «el nombramiento será la próxima semana».

Desde la Diputación, que acaba de crear también el área de Acción contra la Despoblación y Desarrollo Rural (que llevará el alcalde de Forcall y portavoz del PSPV, Santi Pérez), Martí aplaudió la iniciativa autonómica para «trabajar juntos ante el reto de afrontar un problema grave».

En cuanto a la reunión en sí con los alcaldes, Puig anunció políticas de apoyo para sectores productivos de la Plana Baixa como la citricultura y la cerámica. Respecto a la crisis citrícola, defendió la necesidad de que el sector se configure como un «lobi fuerte» en Bruselas y se comprometió a trabajar durante los siguientes meses sobre las cláusulas del tratado comercial con Mercosur. Además, avanzó que «en las próximas semanas» se reunirá con la Plataforma per la Dignitat del Llaurador. También próximamente tiene la voluntad de convocar la Mesa de la Cerámica.

MOSQUITOS // Los munícipes reclamaron asimismo medidas contra la plaga de mosquitos. El president aseguró que es un «problema complejo» que necesita del «compromiso de todas las administraciones». Y explicó que, ante la imposibilidad de realizar vuelos indiscriminados por su afectación al conjunto de la fauna, se valoran «experiencias exitosas» en otras zonas como el uso de larvas o material biológico, así como la utilización de tratamientos que están a la espera del visto bueno farmacológico del Ministerio de Sanidad. «Miraremos a ver cómo, este mismo verano, podemos tomar medidas. La solución no es fácil y hay que trabajar de forma constante y acertada».