La Conselleria de Obras Públicas pedirá, en el grupo de trabajo conjunto que creará con Renfe el lunes para analizar la problemática generada en los Cercanías por las obras del tercer carril, que, una vez finalicen las actuaciones constructivas, se retomen las frecuencias previas, con 40 trenes por sentido. Eso sí, este será un asunto que se abordará “a largo plazo” y no en las primeras reuniones, que se centrarán en cuestiones más inmediatas.

Ayer el gabinete de María José Salvador cerró la primera cita para la mañana del próximo lunes y concretó quiénes serán sus representantes: el director general de Obras Públicas, Transporte y Movilidad, Carlos Domingo; el subdirector general de Transporte, José Moltó; y el director gerente de Ferrocarrils de la Generalitat valenciana, Ángel García.

Ellos abordarán con los tres representantes de Renfe “el día a día” del servicio y evaluarán si es el adecuado “para que al ferrocarril suba el mayor número de viajeros”, señaló Domingo a este diario. Entre los temas candentes estará la evaluación de si los diez autobuses por sentido anunciados en la reunión del lunes para cubrir las deficiencias son suficientes. Aunque Domingo ya señala que la cifra podrá variar en los próximos meses en función de cuándo y de qué manera se desarrollen las obras, porque sus incidencias “serán diferentes”.

Asimismo, también esperan abordar la posibilidad de rebajar el precio de los billetes a la mitad y devolver su importe en caso de incidencias graves, algo que desde Renfe tenían que trasladar a la Comisión delegada de asuntos económicos del Gobierno.

En la cita del lunes se definirá asimismo la periodicidad de las próximas reuniones para seguir de cerca el servicio. H