La Conselleria de Obras Públicas pasa al ataque para reivindicar más inversión en el corredor mediterráneo y la finalización de los problemas en la circulación de los Cercanías que tantas molestias están causando a los usuarios. La responsable del departamento, María José Salvador, anunció ayer que el próximo lunes presentará un lobi de presión que agrupará a la sociedad civil, política y empresarial de la Comunitat Valenciana para exigir la materialización del eje ferroviario litoral.

El nombre escogido es el de Fòrum valencià pel corredor mediterrani, será presentado en la Universitat de València y en él tomarán parte representantes de organizaciones empresariales, sindicatos, universidades, colegios profesionales, cámaras de comercio, puertos y sociedad civil. El objetivo es crear un espacio de intercambio de ideas y exigir al Ministerio de Fomento que finalice las obras actuales “cuanto antes” destacó ayer Salvador.

Asimismo, también reclamará la ejecución del corredor mediterráneo en doble plataforma y que la actuación no se quede en el tercer carril, que no es “nuestro modelo”, señaló ayer la consellera.

Y es que, según destacó ella misma y el secretario autonómico de Obras Públicas, Josep Vicent Boira, a pesar de que el Estado cuenta con 2.500 kilómetros de vías de alta velocidad, esta no existe en el tramo con más pasajeros del Estado (de Valencia a Barcelona) por culpa de la “concepción radial de las infraestructuras” y la inversión del Gobierno en el corredor mediterráneo es un tercio de la del AVE a Galicia: 99.000 euros por kilómetro frente a 339.000, señalaron ambos.

28 puntos // Boira también destacó el escaso avance de las obras actuales. Tras visitar --y fotografiar-- con técnicos de la Conselleria el estado de las vías entre Valencia y Castellón, señaló ayer que apenas “trabajan 20 personas” y que hay 28 lugares entre Valencia y Benicàssim donde no se ha implantado todavía el tercer carril (fundamentalmente estaciones, donde hay que ubicar los cambios de vía, muy complejos).

Boira destacó que, una vez finalicen las obras, el tercer carril no solucionará los problemas de saturación entre Valencia y Castellón, ya que los mercancías y AVE solo podrán circular por una vía y será “un cuello de botella”. H