La solicitud del Consell al Gobierno central de que le transfiera la gestión de los trenes de Cercanías, expresada en una sesión en Les Corts en noviembre por parte del president, Ximo Puig, tiene una condición previa: que el Ejecutivo socialista realice las mejoras necesarias en el servicio que palíen las deficiencias que arrastra, especialmente en materia de atrasos, cancelación de trenes y mal estado de los convoyes. De este modo, el Gobierno autonómico pretende asumir desde cero un Cercanías que, según considera Puig, deben estar «residenciado en el espacio autonómico».

En este sentido, desde la Conselleria de Infraestructuras confirman que su titular, María José Salvador, ya ha iniciado los contactos con el Ministerio de Fomento para crear una comisión entre ambas administraciones que se encargue de gestionar el traspaso de competencias, aunque hay que «valorar los condicionantes», reconoce Salvador.

Es el compromiso al que llegó con el secretario de Estado de Infraestructuras, Pedro Saura, tras reunirse en la comisión de seguimiento del Cercanías, celebrada el pasado 5 de diciembre.

problema enquistado // El Gobierno valenciano quiere poner fin así a los problemas endémicos que sufre este servicio en la Comunitat, especialmente en la línea C-6 que conecta València con Castellón. Sin ir más lejos, el pasado domingo los usuarios sufrieron la cancelación del tren de las 16.30 horas sin previo aviso.

Pero tampoco se libran de los problemas las conexiones con el norte de la provincia, cuyas frecuencias se incrementaron el pasado mes de noviembre. Ayer, una avería en uno de los convoyes en la misma Font de Sant Lluis de València hizo que se suspendiera el de las 6.45 horas, con lo que los viajeros tuvieron que realizar un trasbordo, con el consiguiente retraso.

Por si fuera poco, el AVE que conecta Castellón con Madrid también sufrió un problema técnico ayer por la mañana que hizo que tuviera que detenerse en Requena a la espera de que otro tren recogiera a los pasajeros para continuar el viaje. El tiempo total de demora, según indican fuentes de Renfe, fue de 74 minutos.

reiteración // Fuentes de Presidencia indican que es la elevada frecuencia de problemas de este tipo los que han hecho que el Ejecutivo autonómico quiera asumir las competencias. No es la primera vez que se hace esta exigencia al Gobierno central, pero la inversión en Cercanías en la Comunitat que anunció en el 2017 el anterior ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, apagó un tanto el ánimo reivindicativo del Consell. Ahora, parece que la petición va muy en serio.