El conseller de Educación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà, anunció ayer que “el curso que viene habrá más aulas de 2 años en Castellón”, dada “la alta demanda tanto de municipios como de los propios colegios”. El programa piloto, que cuenta este curso “con siete clases en Castellón, Vila-real, Burriana y la Vall”, se ampliará para “crecer en igualdad de oportunidades”, especificando que “en los informes que se están elaborando para valorar el plan se ha detectado que el 86% de los matriculados no estaba escolarizado anteriormente”, aludiendo a las reticencias del sector de las guarderías privadas. “No les hacemos la competencia, sino que complementamos la oferta para que llegue a todos”, dijo.

Marzà aseguró ayer, en el transcurso de Los desayunos del Casino Antiguo, ante una audiencia no solo del sector educativo, sino empresarial y social, que el objetivo de las políticas educativas y culturales del Consell es “cambiar las cosas, para reconducir y redefinir prioridades y a ser más eficientes con el dinero público en un sistema muy oscuro durante años”. Reiteró los “graves problemas de la infrafinanciación del Gobierno central hacia la Comunitat, que nos deja en una situación de vulnerabilidad absoluta”. “Con los 800 millones que nos tocan, solo en educación se podría mejorar la financiación de las universidades públicas, las matrículas podrían ser gratuitas, habría más colegios, sin desdobles y con más profesorado”.

PRIORIZAR LO PÚBLICO // Fue tajante al decir que “ninguna escuela pública cerrará, y se harán políticas para fomentar su matrícula”, en contestación por la situación del colegio Blasco Ibáñez --que ha perdido una línea en el borrador del nuevo mapa escolar, y que esta tarde ha programado una Sentada per l’escola a la salida de clase--, añadiendo que “los conciertos deben llegar donde no lo hace la escuela pública”.

Y adujo la “necesidad de un Gobierno ya en Madrid”. “No se puede avanzar en muchos temas importantes, como la paralización de la LOMCE, por ejemplo, sin interlocutor”, señaló.

Al hablar de una de las novedades para el curso próximo, la jornada continua, pidió a los centros que no se fijen solo “en el cambio de horario, sino en generar un proyecto pedagógico innovador”. Señaló que se van a “priorizar las infraestructuras, necesarias, con hasta 700 peticiones de 1.400 centros que existen en la Comunitat para hacer reformas o remodelaciones”, y la creación de dos mapas de titulaciones, uno encarado a la universidad y otro a la FP para “interaccionar mejor con las necesidades del entorno”. H