La Conselleria de Obras Públicas y el Ministerio de Fomento se pasan la pelota a la hora de decidir la ubicación de la estación intermodal que se disputan Castellón y Vila-real y sobre la que este último Ayuntamiento ha decidido recurrir por vía judicial para que Fomento borre toda referencia hasta que no esté definida.

De esta manera, la consellera autonómica, María José Salvador, ha afirmado a este diario que no tiene “mucho sentido convocar la mesa donde se tiene que decidir [la ubicación de la estación] hasta que no haya un nuevo Gobierno”. A este respecto, desde Fomento recuerdan el convenio que la ministra Ana Pastor y el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, firmaron el 25 de febrero del 2014 y por el cual corresponde a la Generalitat “la elaboración de los estudios relativos al encaje territorial y urbanístico y de demanda” de la terminal.

Desde el Ministerio continúan señalando que, una vez que la Conselleria haya decidido “la ubicación de la plataforma logística, el Ministerio de Fomento, dentro de lo establecido en el protocolo y siempre con el conocimiento de la comisión de seguimiento del mismo, procederá a elaborar los estudios de viabilidad económica, diseño funcional y modelo de gestión para el desarrollo de la terminal intermodal”.

Es decir, que la Conselleria debe decidir la ubicación y después el Ministerio abordará el tamaño y su orientación empresarial tras reunir a la comisión. Pero también es cierto que la comisión se debería haber constituido el 25 de marzo del 2014, como máximo, y aún no se ha producido.

Así, Salvador señala: “Las cosas hay que hacerlas bien, de esta infraestructura depende el futuro económico de la provincia”. Y afirma que han esperado “muchos años con el PP” y que serán “criterios técnicos y no políticos” los que sirvan para situarla. H