Las obras que se están desarrollando en la CV-10 en la variante de Betxí son las primeras de tres con las que el Consell mejorará 21 kilómetros de la CV-10 y de sus conexiones. Como publicó Mediterráneo en su edición de ayer, los trabajos de Betxí comenzaron en la madrugada del lunes.

Las tareas que ha proyectado la Conselleria de Obras Públicas se localizan en una longitud de 17,5 kilómetros de la autovía de los términos municipales de Betxí, Onda, Borriol y Castellón. Además, se repararán un total de 4 kilómetros de ramales.

Con los trabajos, la Conselleria busca mejorar la seguridad vial en la carretera, reforzando el firme y aumentando la capa de rodadura. Se cierran, de forma alterna, uno de los dos sentidos de circulación de la autovía durante un mes, dando lugar a retenciones en los puntos en los que se pasa de dos carriles a uno.