La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, señaló ayer en Valencia que su equipo de gobierno trabaja “para facilitar el pago de tributos y que el ayuntamiento sea un aliado y no una carga para los vecinos”, especialmente en época de crisis. La socialista hizo estas declaraciones en el debate organizado por la Real Sociedad Económica de Amigos del País en Valencia (RSEAP) sobre la Gestión económica municipal en las grandes ciudades, junto al alcalde de Valencia, Joan Ribó; su homólogo en Alicante, Gabriel Echávarri, y el de Elche, Carlos González.

Marco desglosó las cinco grandes líneas de gobierno en este sentido: “Modernización de la fiscalidad, no aumentar la presión fiscal, revisión de las ordenanzas fiscales, carta tributaria e incremento de la inspección”, según enumeró la socialista. H