Tras cinco días de fuego y cenizas, el primer gran incendio del verano en los montes de Castellón, el de la Serra Calderona que ha arrasado unas 1.300 hectáreas, se dio por controlado ayer sobre las 20.00 horas, y se prevé darlo por extinguido a mitad de semana.

Segorbe, Altura, Soneja y Gátova han visto como las llamas quemaban sus montes, un 30% en suelo protegido del parque natural, pese al constante esfuerzo de bomberos, militares, agentes medioambientales, policías locales y autonómicos, Guardia Civil, unidades de SAMU, voluntarios y vecinos. La lucha contra el fuego ha sido dura y lo continuará siendo todavía para el dispositivo de más de 40 personas que permanecerá en los próximos días refrescando el suelo y asegurando el perímetro para impedir que vuelvan a reproducirse las llamas. Todo apunta a que en cuestión de días se podrá dar por extinguido este primer infierno del verano en los montes de Castellón, que son un polvorín, como denuncia periódicamente este rotativo y lo volvió a hacer hace apenas 15 días, mediante un informe en el que se advertía que los planes locales antiincendios siguen sin elaborarse y el abandono de los montes, y su falta de limpieza y adecentamiento, contribuyen a la proliferación del fuego, en caso de producirse.

Las altas temperaturas previstas para los próximos meses, auguran también un verano de alto riesgo en las montañas de la provincia, complicado en cuanto al riesgo de incendios forestales.

EL ORIGEN // Las primeras hipótesis fijan el origen del fuego de la Serra Calderona en un rayo latente, aunque la investigación todavía está abierta. Con la calma, llegará también la valoración de los daños de este incendio forestal.

El servicio de emergencias de la Generalitat dio por controlado el fuego a través de las redes sociales y el presidente de la Diputación, Javier Moliner, fue el primero, mediante el mismo medio, en agradecer el esfuerzo y trabajo de los casi 500 efectivos que se han desplazado hasta el corazón de las llamas durante los últimos días para atajar el fuego y darlo, en días, por extinguido.