La comisión de Industria de Les Corts Valencianes salió al paso ayer de los retrasos en torno a las autorizaciones administrativas para la renovación y ampliación de las minas de extracción de arcillas, materia prima básica para el azulejo, con los primeros pasos para desbloquear un asunto que se viene arrastrando desde hace casi dos décadas.

El presidente de la comisión y diputado de Compromís, Víctor Garcia, y la portavoz del área de Territorio de la Cámara autonómica, Belén Bachero, se apresuraron ayer a anunciar que en breve se reunirán con el conseller de Economía Sostenible, Rafael Climent, con el fin de desbloquear un asunto que, a medio plazo, podría afectar de manera directa a la cadena de suministros de la cerámica, tal y como viene denunciando la Asociación de Empresarios de Sílices, Caolines y Arcillas de la Comunitat.

MESA DE LA CERÁMICA // Desde la patronal azulejera Ascer recordaron ayer que hay expedientes que llevan años sin resolverse y que, de hacerlo, garantizarían el abastecimiento de arcillas durante lustros. Además, el colectivo que agrupa a buena parte de las empresas azulejeras señaló que este es un tema que se ha trasladado recientemente a la Mesa de la Cerámica constituida por la Generalitat valenciana y la industria del sector, por lo que esperan que de estas gestiones puedan salir avances tras años de parálisis.

Los dos diputados castellonenses mostraron su voluntad de colaborar al máximo en el borrador de ley de minas en un asunto enormemente complejo y que actualmente prepara el Consell, con el objetivo de que se asegure la materia prima, pero también permita reducir sus efectos medioambientales.

El presidente de la comisión de Industria reconoció ser consciente «de la necesidad de pasta roja para la cerámica, del agotamiento de las minas actuales y la necesidad de buscar soluciones, porque la importación de material genera gravosos costes para las empresas y, por lo tanto, pérdida de competitividad y de puestos de trabajo». De ahí que hayan decidido desbloquear un asunto que «los anteriores gobiernos del PP tenían aparcados durante años», se quejaron.

Bachero añadió que «es esencial desbloquear este asunto teniendo en cuenta a todo el mundo y midiendo hasta el milímetro las consecuencias ambientales y económicas de las decisiones».