El actual modelo consorciado del Hospital Provincial, con la participación al 50% de la Diputación y la Generalitat, regresa al debate político con la petición socialista --hoy en Les Corts-- para que se promueva su disolución, a lo que se sumó ayer la iniciativa de Compromís para que el Ministerio de Hacienda transfiera directamente al Consell el dinero destinado al centro sanitario, sin que estos fondos tengan que pasar por la institución provincial. Paralelamente, la consellera de Sanidad, Carmen Montón, instó al presidente Javier Moliner a «facilitar el proceso de integración a la red pública autonómica», al tiempo que pidió no usar este centro como «arma política», según dijo ayer en Castellón.

La diputada vila-realense de Compromís Mònica Àlvaro anunció una propuesta en les Corts en la que se pide que los fondos del Estado dirigido a hospital no pasen por la Diputación Provincial y lleguen a través de la Generalitat. La consellera, por su parte, instó a Moliner a que «no convierta a este hospital en un lastre fruto de la anterior gestión».

Montón añadió que el presidente de la Diputación de Castellón tiene ante sí un dilema, que pasa por mantener el actual modelo, heredado de años de mala gestión, o contribuir a mejorar las posibilidades del centro hospitalario. La consellera recordó que el informe de Intervención «saca los colores por la larga lista de anomalías», de ahí que pida al presidente Moliner que diga «qué quiere ser, si ariete en contra del Consell o decide contribuir al presupuesto del Consorcio» y contribuir en su mejora, según explicó la consellera ayer durante su visita a Castellón.

La mayoría de los integrantes de la comisión de Sanidad entienden que esta propuesta para que se debata la disolución del Consorcio saldrá adelante hoy. H