El pasado 7 de febrero, el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme) publicaba la constitución de Intercom Onda, empresa dedicada a la comercialización de azulejo. Solo unos días antes, el 31 de enero, nacía Espacio Cerámico del Mediterráneo con un fin muy similar. Son solo dos ejemplos del auge de un tipo de firmas que, si bien siempre han existido en el clúster cerámico, cogen nueva fuerza en un momento en el que el sector tiende a la concentración y a una dualidad cada vez más evidente entre unos pocos gigantes de la producción y el resto de firmas.

El catedrático de Organización de Empresas de la Universidad Politécnica de València, José Luis Hervás, tiene claro que este proceso difícilmente tendrá marcha atrás. «A las firmas pequeñas y medianas les quedan dos opciones; o especializarse mucho en algún segmento productivo o apostar por la terciarización, es decir, dejar a un lado la fabricación y comercializar lo que otros producen», indica. Esto evita muchos problemas de estocaje en un sector en el que, según indican varias fuentes, existe un exceso de capacidad productiva instalada.

En el clúster azulejero castellonense, el mejor ejemplo de esta apuesta, por facturación y veteranía, es APE Grupo. Su CEO, José Miguel Pellicer, explicó a este diario que su modelo de negocio permite «estructuras mucho más ligeras» y unos costes más asumibles y controlables en periodos de dificultades. Con estos mimbres, la firma ha pasado de facturar 14 millones de euros el 2009 a superar los 40 millones el ejercicio pasado, con una plantilla de unas 120 personas.

ZIRCONIO CAMBIA DE MODELO // Otro caso significativo es el de Zirconio que, controlado por la multinacional malaya Niro Granite, en el 2018 decidió externalizar la producción. Fuentes de la empresa explicaron que para compañías de tamaño medio cada vez es más difícil acometer las inversiones necesarias para adaptar las plantas a los grandes formatos o a la industria 4.0. «Cada vez esta tendencia irá a más porque permite centrarse en aquello que el cliente demanda, que es valor añadido, y en canales específicos como el contract». Sifre o Struker son otras dos compañías que no producen las baldosas que comercializan.

Desde las firmas productoras indicaron que esta terciarización es actividad complementaria a la fabricación, puesto que finalmente acuden a ellas para adquirirles la mercancía.