La Federació d’Associacions per la Llengua, Escola Valenciana, quiso mostrar ayer su total oposición a la aplicación del artículo 155 de la Constitución en el conflicto de Cataluña al considerar que «no es la mejor respuesta política».

Desde la entidad se entiende que esta es «una medida represora más que no abre caminos de diálogo para superar el conflicto que enfrenta al pueblo catalán con el Estado español». A su parecer se trata de una «venganza política que vulnera los derechos ciudadanos más básicos, en un marco de crisis del modelo territorial muy evidente».

Escola Valenciana insiste en que con esta medida «cargada de rabia, el Gobierno ha despertado el viejo fantasma del fascismo y ha vuelto a nutrir la españolidad más retrógada y franquista», convertida en la excusa para «ocultar que ni el modelo territorial ni el de financiación nacidos de la nombrada Transición española, ofrecen un buen modelo de crecimiento y de gobierno de las autonomías».

A su vez, lo consideran un ataque contra «la diversidad lingüística y cultural presente en las nacionalidades que forman el Estado español».