David Romero y Caterina Valls son los dos protagonistas de una historia que evidencia que la vida siempre se abre paso. A ella una peritonitis se le complicó en el 2015 y tuvieron que extirparle las trompas de falopio. Él sufre un cáncer raro --paraganglioma metastásico-- del que se ha tratado en el Hospital Provincial de Castellón, entre otros centros. Ambos buscan tener un hijo que no sea portador de la mutación genética responsable de este tumor a través de fecundación in vitro. Tras intentarlo en una ocasión, han lanzado una campaña de micromecenazgo para reunir fondos y costear el tratamiento.

A Romero le diagnosticaron paraganglioma metastásico en el año 2013 y desde entonces ha sido tratado en varios centros, entre ellos en el Hospital Provincial. Allí, según explican fuentes del hospital, le ha atendido en varias ocasiones la doctora Isabel Tena, una especialista en tumores raros que en la actualidad se encuentra formándose en la materia en Estados Unidos.

Romero y Valls, que residen en Cataluña, definen a Tena como una «superespecialista» y una de las grandes responsables de que ambos mantengan la esperanza.

MICROMECENAZGO // Precisamente ahora, Romero ha acabado un tratamiento de quimioterapia con el que ha «mejorado bastante», según su esposa. Es por ello que se han decidido a lanzar la campaña de crowfunding, pues creen que «es el momento» de volver a intentar una fecundación in vitro. Ya lo probaron hace apenas unos meses, pero en aquella ocasión el tratamiento, que cuesta 13.865 euros, no funcionó. De los 14 óvulos, nueve fueron fecundados y tres sobrevivieron. De ellos, solo uno no era portador del síndrome de paraganglioma hereditario, pero Nemo, como lo llamaron, tampoco sobrevivió.

Ahora piden la colaboración ciudadana a través de la plataforma de micromecenazgo Gofundme, donde esperan reunir al menos 4.000 euros para costear el nuevo tratamiento. «Tenemos un 50% de probabilidades de éxito, lo cual nos parece un porcentaje suficiente como para intentarlo», afirma Valls. «Queremos hacer realidad el sueño de cualquier pareja: tener una descendencia sana», añade en conversación con Mediterráneo.

En los primeros días de la campaña han logrado algo más de 2.000 euros,y se muestran esperanzados en que lograrán su objetivo. «El resto confiamos en poder asumirlo nosotros con nuestros ahorros», sentencia Valls, que suspira por esta segunda oportunidad.