Los 52 pasajeros del crucero de lujo Crystal Esprit han atracado a primera hora en el muelle de Levante de PortCastelló. Por delante tenían una jornada repleta de actividades en la provincia y una de las personas que les ha acompañado durante su travesía, la responsable de cruceros de la Fundación PortCastelló, Susana Soria, asegura que «se han ido encantados y repetirán».

Americanos y japoneses de alto nivel adquisitivo, estos cruceristas capaces de desembolsar 1.500 euros por persona y día por el trayecto no son unos turistas más. «Es un barco especial en el que hay más tripulantes —80—, que pasajeros —52—», confiesa Soria. La mayoría de ellos eligieron pasar la jornada en la capital de la Plana y se fueron «enamorados de Castelló. Les gustó todo, decían que la ciudad olía muy bien y que la gente vivía de maravilla».

Entre la visitas que han realizado en la ciudad destaca la del Mercado Central, donde les llamó especialmente la atención el pescado: «Alucinaron con las galeras. No sabían dónde estaba la cabeza y dónde la cola. También les gustó ver el corte de la ventresca, gambas...». La mayoría disfrutaron también en la mesa de la mejor gastronomía local.

Al margen de la visita por Castelló, donde los pasajeros del Crystal Esprit pudieron visitar también el Casino Antiguo o distintos edificios modernistas, estos potentados turistas pudieron escoger otras alternativas para disfrutar del día en la provincia como jugar a golf con el padre y entrenador de Sergio García, pasear por la Serra d'Irta y participar en la reconstrucción de nidos de murciélagos, practicar espeleo-kayak en la grutas de San José en Vall d´Uixó, o recorrer la vía verde que une Benicàssim con Oropesa concluyendo con una sesión de spa en El Palasiet.