A Ramón Peris no hay reto que se le resista. Este burrianense, amante de la bici y de los viajes de larga distancia, une ambas pasiones por un objetivo solidario: la construcción de un hospital en la ciudad de Ghana. Se trata de un proyecto impulsado por la oenegé castellonense Youcanyolé, una entidad que lucha por erradicar la pobreza sembrando su granito de arena en algunas de las regiones más vulnerables del mundo, como Nairobi o, en este caso, Ghana.

Un día cualquiera en la playa, a Peris, que disfrutaba del Mediterráneo junto a su pareja, Pamela, se le ocurrió la idea de embarcarse en esta cruzada solidaria y, en un primer momento, el destino sería Machupichu. Todo parecía indicar que cumplirían el plan previsto hacia las alturas de los Andes en Perú, hasta que les salpicó, como a todos, la crisis sanitaria del covid-19, y rápidamente, contemplaron un pequeño giro de pedal: la marcha se realizaría por Castellón, para evitar futuras complicaciones debido a los rebrotes del virus. Pamela no dudó en sumarse al proyecto porque la meta «merecía la pena».

Así lo narraba Peris a Mediterráneo con el corazón en la mano y un deje de emoción en su voz, ya que el deportista, de profesión fisioterapeuta, asegura que a partir de ahora solo va a emprender retos solidarios porque «el recorrido deja de ser un mero viaje y pasa a ser un trance emocional que se completa con una satisfacción personal que no tiene precio».

La hoja de ruta

La pareja, que lleva semanas entrenando duro para dar lo mejor de sí mismos, inicia este domingo 26 de julio un recorrido desde Burriana que abrazará todos los rincones de la provincia. Bajo el lema Ales i Vents 135, la ruta tendrá una duración de 10 días; 1.380 kilómetros. «La idea es rodar durante la noche, por el hándicap de la temperatura y la humedad. Nos estamos preparando al máximo, yo estoy acostumbrado a entrenar pero Pam se estrena superando con creces las expectativas. Lo cogemos con muchas ganas», declara Ramón Peris.

El medio, dos bicicletas de montaña con alforjas, que arrastrarán unos 25 kilos de peso desde el arranque. «Se parece a la ruta BuPaLo (Burriana-París-Londres) que sellé con éxito el pasado año salvo por dos diferencias: el desnivel se acentúa de 10.000 a 26.000 kilómetros, y la mejor de las noticias, esta vez no lo haré en solitario».

Labor humanitaria

Con esta iniciativa, Peris pretende ayudar a su buen amigo y doctor Miguel Medina, fundador de la oenegé castellonense Youcanyolé, que desde hace siete años trabaja en el barrio de Kibera, en Nairobi, una de las zonas más pobres de Kenia y por tanto del mundo. Allí han desarrollado proyectos médicos con el fin de que, tanto profesionales sanitarios como de otros campos, tengan la oportunidad de conocer la realidad de las personas que viven en estos países en vías de desarrollo y puedan, con su acción, ayudar a mejorar la calidad de vida de su pueblo.

Para aquellos que estén interesados en colaborar con el proyecto, la entidad habilita un número de cuenta bancario y un teléfono móvil para realizar la transferencia sin ningún tipo de traba. «El pasado año abrimos un portal de donaciones a través de una campaña de crowdfunding, pero el registro era complejo, así que este año lanzamos la oportunidad de colaborar a través de un simple Bizum o una transferencia a la cuenta que encontrarán en la web de Youcanyolé», recuerda.

Comienza la cuenta atrás. Diez días de adrenalina, sufrimiento y pasión, la fórmula de un corazón solidario y una mente intrépida que, junto a su chica, se embarca en un viaje memorable. Bajo el paraguas de las cálidas noches de verano, Ramón Peris y Pamela Collado ponen rumbo a la libertad.