El coordinador del PP de Castellón en materia de acción electoral, Luis Martínez, lamentó ayer que “el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, cree cargos públicos solo para un armamento de sus guerras internas del socialismo y para hacer de contrapeso a José Benlloch”.
Martínez interpretó así el nombramiento de Adolf Sanmartín como delegado territorial de Presidencia, y dijo que, “en realidad, se trata de una figura creada para que liquide el poder del diputado provincial José Benlloch en sus aspiraciones de controlar el PSOE”.
Martínez aseguró que “al PP no nos importan las guerras internas de los socialistas, pero sí que las ansias de poder y el ego de unos y los conflictos internos de todos los acabemos pagando con cargos como este”. H
