«Vosaltres heu de menar el futur de Castelló, vosaltres sou futur». Con estas palabras, Amparo Marco dio ayer inicio al acto con el que el Ayuntamiento de Castellón quiso celebrar el Día Internacional por los Derechos de la Infancia. Jugando con el significado del espacio cultural que comparten el consistorio y la UJI, y que hace referencia a «aquellos niños y niñas, como vosotros», que trabajaban hilando el cáñamo en la ciudad, la alcaldesa departió con los pequeños del CEIP Jaume I durante unos instantes para hacerles ver la importancia que la cultura tiene.
Y, para plasmarlo, ayer el consistorio presentó un cuento, Magnífica Castelló, en la que una pequeña recorre los lugares más emblemáticos del término municipal y explica brevemente su historia. Una forma didáctica que la autora, Laura Pantaleón, se encargo de verbalizar ante los peques, que no perdieron detalle de los dibujos y fotografías de Castellón.
Ellos son los primeros afortunados en leer la historia, pero no serán los únicos. El Ayuntamiento ha editado 4.000 ejemplares, 2.000 en castellano y 2.000 en valenciano, que regalará a los niños y niñas que visiten el palacio consistorial de la plaza Mayor.
El acto de ayer estuvo además cargado de simbología. Una docena de menores leyó la Declaración de los Derechos del Niño. Y lo hicieron en varios idiomas: chino, italiano, inglés, árabe, rumano o alemán se escucharon en el salón de actos del Menador, junto al castellano y al valenciano, para destacar aquello que todo niño debe poseer y que muchos lamentablemente no tienen aún. Una forma de simbolizar también el carácter acogedor de Castellón. Y es que, como destacó la alcaldesa: «Todos los que aquí vivimos somos castellonen- ses, independientemente de dónde hayamos nacido».
