El Ayuntamiento de Castelló ha cerrado el plazo para presentar alegaciones respecto al expediente de proyecto de retirada de la cruz del Ribalta. El trámite se ha saldado con 28 reclamaciones para que esta iniciativa sea cancelada y 11 para que se proceda al derribo pese a las medidas cautelares impuestas por un juzgado, que ha suspendido por el momento el procedimiento.

Lo dio a conocer ayer la portavoz del bipartito, Verònica Ruiz, en la rueda de prensa para informar sobre los asuntos aprobados en junta de gobierno. De las 28 alegaciones en contra, solo seis, informó la concejala de Cultura, estaban debidamente argumentadas: la de Abogados Cristianos, la del grupo municipal del PP y cuatro de particulares. Las demás no cumplían con este requisito y, por lo tanto, no serán tenidas en cuenta a la hora de valorar.

en otro sentido // También se registraron reclamaciones en sentido contrario, instando al derribo, y todas ellas cumplían con lo requerido en el apartado argumental. En concreto, presentaron alegaciones la Asociación Republicana Francesc González Chermá, el grupo municipal de Castelló en Moviment, Fundació Escola Valenciana, Col·lectius per la Llengua i la Cultura, Associació de Familiars de Víctimes del Franquisme del Cementeri de Castelló, Grup per la Recerca de la Memòria Històrica de Castelló, Intersindical Valenciana, Col·lectiu Universitat Jaume I per la Llengua i la Cultura y tres personas particulares, entre ellas una miembro de Xarxa Cristiana, destacó la edila de Compromís.

«Ahora toca empezar a trabajar al respecto», señaló Ruiz, que confirmó que, por el momento, el Ayuntamiento no ha presentado todavía el anunciado recurso al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ante la decisión de un juzgado de lo contencioso-administrativo de no levantar las medidas cautelares contra el derribo de la cruz del Ribalta.

«Quiero agradecer profundamente a las personas que han argumentado en favor de esta decisión», señaló la portavoz del equipo de gobierno municipal.