Como un día cualquiera del mes de junio, aunque con las indicaciones propias de la denominada nueva normalidad. La entrada de Castellón en la fase 2 de la desescalada supone la reapertura al completo de las grandes superficies comerciales.

Desde la patronal que representa a los intereses de estos operadores en la Comunitat, Anged, su portavoz Joaquín Cerveró indicó que este regreso «se ha realizado al 90%» en la provincia, con su correspondiente impacto en el empleo. «En Castellón la plantilla de personal que ha salido de los ERTE es de 2.500 empleados, de los cerca de 20.000 de toda la Comunuitat», explicó. Un número que no solo abarca al personal de tiendas, sino también a empleados de centros y gente dedicada a las tareas logísticas.

La reincorporación ha sido gradual, ya que muchas de las marcas optaron por reabrir progresivamente hace dos semanas, acogiéndose a la normativa de acotar sus espacios a un máximo de 400 m2. En cambio, otros han vuelto a sus puestos en los últimos días, dentro de los procesos de acondicionamiento de los locales.

Uno de los lugares con mayor expectación fue El Corte Inglés. Parte de la plantilla recibió a los primeros clientes con aplausos en una jornada que desde la empresa calificaron de «emocionante». Además de la obligación de acudir con mascarilla y los dispensadores de gel hidroalcohólico, la cadena cuenta con sistemas de higienización de la ropa a base de planchados de vapor y luz a base de rayos ultravioleta-C. También se limita la presencia de clientes en los ascensores, con uso preferente para personas con movilidad reducida, carros de bebé y carros de la compra.

RECORRIDOS / Por otro lado, en el centro comercial Salera ya están en funcionamiento las normas de uso en las áreas comunes, con puertas independientes de entrada y salida, el conteo automático de asistentes o recorridos marcados en el suelo. La inmensa mayoría de operadores ya están abiertos, a falta de algunos dedicados a la venta de ropa, que lo harán en breves días, una vez concluya el proceso de adaptación a las actuales normas sanitarias.

Estepark también experimenta su desescalada, con la reapertura de tiendas al aforo permitido en esta fase, y los locales de restauración que ya han adaptado sus espacios a la fase abierta ayer. Mientras, los cines estarán disponibles «muy pronto», indican desde este complejo.

Los centros comerciales con tiendas sin salida al exterior tuvieron que esperar hasta ayer para recuperar la normalidad perdida a causa del coronavirus, mientras que en locales en las principales calles de las ciudades también se recuperó el aforo completo.

Al no ser fechas de grandes concentraciones de clientes, como Navidad o periodos de rebajas, la limitación del 40% de la capacidad máxima de personas apenas se hizo notar en este segmento de la economía.