La asamblea del Consorcio Provincial de Bomberos ratificó ayer el «histórico» convenio sellado entre la Diputación de Castellón y la Generalitat meses atrás para impulsar el plan de prevención y extinción de incendios que se materializará con la creación de 16 brigadas forestales en la provincia.

El programa, cofinanciado por ambas administraciones con 945.922 euros cada una, permitirá «mejorar la prevención de incendios y la respuesta ante posibles incidencias que atenten contra el patrimonio natural y, por ende, contra los vecinos del mundo rural castellonense», según el diputado responsable del Consorcio de Bomberos, Luis Rubio. En este sentido, Rubio destacó que estas nuevas brigadas, integradas por un total de 80 efectivos, tendrán un carácter preventivo para la realización de trabajos de mitigación de riesgo por emergencias mediante la limpieza y adecuación de pistas forestales o zonas de interfaz urbano-forestal, entre otras. «Con estos trabajos conseguiremos que los vecinos que viven en zonas con elevada masa forestal ganen en seguridad mejorando así su calidad de vida», apuntó.

Para ello, fruto de esta iniciativa conjunta entre la Diputación y la Generalitat se llevarán a cabo tareas como la señalización de accesos, la eliminación de combustible, la limpieza o adecuación de puntos de aguas. También esta previsto que estos efectivos lleven a cabo el acondicionamiento de zonas no urbanizadas, el aprovechamiento forestal o la recuperación de caminos. Estos trabajos son necesarios para la creación de las infraestructuras integradas en la extinción pasiva de los incendios forestales e ideados para complementar y mejorar la red de áreas de cortafuegos ya existente.

Este plan de actuación forestal se engloba dentro de uno de los ejes estratégicos de la gestión del gobierno provincial, como es el de la consolidación de la población rural a través de la campaña Repoblem, protegiendo de este modo su patrimonio natural.