La Diputación de Castellón ultima el proceso para convertir a la provincia de Castellón en un territorio cardioprotegido. Así, una vez adjudicado el contrato de adquisición y mantenimiento de los desfibriladores, está prevista su instalación y la formación de las 2.000 personas que tendrán que usarlos a partir del próximo 4 de septiembre.

En total son 200 los equipos de cardioprotección los que ha adquirido la Diputación, de los que 196 equipos se instalarán en los municipios que han solicitado este servicio y los otros cuatro los ubicarán en el Palacio Provincial, en Nuevas Dependencias, en Penyeta Roja y en el Castillo de Peñíscola, edificios de uso público de la institución provincial.

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Se trata de desfibriladores externos semiautomáticos, que deberán ser destinados al restablecimiento de un ritmo cardiaco eléctrica y mecánicamente efectivo ante casos de fibrilación ventricular o de taquicardia ventricular en ausencia de pulso, que puedan registrarse en deportistas, personas mayores, enfermos con patología cardiovascular previa o personas sin patología previa con concurrencia de súbita parada cardiorrespiratoria.

La diputada de Acción Social, Elena Vicente-Ruiz, ha destacado que “hemos atendido las 126 solicitudes de ayuntamientos de la provincia y hemos priorizado la instalación de los desfibriladores y las acciones de formación en los municipios más pequeños y con menos servicios”. Y es que se trata de los municipios que tienen mayor puntuación en la valoración de las solicitudes formalizadas.

En cuanto a la articulación de acciones de formación de los operadores no sanitarios y a la puesta en funcionamiento de los desfibriladores, se han tenido en cuenta tanto los servicios disponibles, como los núcleos urbanos o la población. Así, la Diputación entregará a cada ayuntamiento desde un desfibrilador, como es el caso de los municipios más pequeños, hasta los siete dispositivos que instalará en Castellón de la Plana.

Inicio en Villores, Villanueva de Viver y Sacañet

“Son los propios ayuntamientos los que han seleccionado los perfiles más adecuados para recibir la formación necesaria para poder utilizar los desfibriladores. Así, se comenzará a partir del 4 de septiembre en Villores, Villanueva de Viver, Torralba del Pinar, Sacañet, Castillo de Vilamalefa, La Torre d’en Doménech, Higueras, Matet, Argelita y Ayódar”.