L a Diputación de Castellón ha aprobado esta semana las bases del Plan Castelló 135, con el que pretende inyectar a los ayuntamientos un total de 12,4 millones de euros a lo largo de este año. Con esta iniciativa, la institución que preside Javier Moliner busca agilizar al máximo el proceso y posibilitar que las diferentes localidades concluyan las obras municipales durante este ejercicio.

El diputado provincial de Cooperación, Iban Pauner, aseguró ayer que la oficina técnica de la Diputación «ha trabajado a pleno rendimiento con tal de que éste, el mayor esfuerzo inversor que hace la Diputación en los 135 municipios de la provincia, sea una realidad palpable cuanto antes», explicó el responsable del departamento, quien incidió que lo importante es «que genere oportunidades laborales en nuestros pueblos y que repercuta en más bienestar y calidad de vida en todos los rincones de la provincia», explicó en un comunicado.

Pauner detalló que para llevar a cabo este objetivo con todas las garantías posibles se han tomado las medidas oportunas con tal de sacar adelante este plan promovido por el presidente Moliner, «que no tiene otro afán que los 135 municipios de la provincia sepan que contarán con este importante espaldarazo económico procedente de la Diputación y puedan ambicionar grandes proyectos en beneficio de los vecinos», señaló el popular.

Para el diputado provincial, este plan logrará «dotar de mayor estabilidad a este proyecto y nos permitirá garantizar a los pueblos una vía de financiación para que, desde la tranquilidad que confiere la seguridad de que contarán con esta inyección económica, emprender aquellas inversiones que redunden en una mayor calidad de vida para sus vecinos», sentenció Pauner.