El pleno ordinario de la Diputación de Castellón, en el que tomará posesión como nuevo diputado del PSPV tras la salida de José Benlloch, tiene previsto dar hoy su visto bueno a las bases del Plan 135 (antes Poys) para este año. Se trata de las ayudas a los pueblos para la realización de obras y servicios que contó en el 2017 con un presupuesto récord de 12,3 millones de euros y, por primera vez, llegó a todos los municipios de la provincia de Castellón.

Por otra parte, diversos temas de actualidad entrarán en el debate de la sesión a través de las mociones de los partidos. En este sentido, es previsible que la institución apruebe tres propuestas del grupo popular --tiene mayoría en la Diputación--. Por un lado, el rechazo a la nueva normativa autonómica sobre los bous al carrer, que exige un segundo médico en los festejos; por otro, solicitar el mantenimiento de la prisión indefinida revisable, y, por último, rechazar la nueva tasa para los residuos cerámicos.

Además, el Caso Gürtel se cuela en el plenario en una moción de Castelló en Moviment (CSeM), que pide auditar los contratos con empresas de la trama.

piscina provincial // Además, la Diputación prevé aprobar una modificación del contrato de mantenimiento de edificios de la Diputación para incluir de forma temporal la gestión de la Piscina Provincial, para lo habilita una cantidad de casi 23.800 euros.