La Diputación de Castellón casi reeditó ayer la histórica votación de los presupuestos del 2017, que solo contaron con la oposición del representante de CSeM, al lograr aprobar las cuentas del 2018, por las que gestionará 135 millones de euros, con el respaldo del PP -del equipo de gobierno con mayoría absoluta-, la abstención de PSPV y Ciudadanos (Cs) y los votos en contra de Compromís y Castelló en Moviment (CSeM).
Se cumplieron así las previsiones de la víspera, salvo por el caso de Cs, ya que esta formación aceptó en una reunión celebrada in extremis la propuesta de incluir en el documento algunas de sus propuestas para, a cambio, no pronunciarse en contra.
Los presupuestos se aprobaron en una sesión exenta de tensión, con apenas debate, en la que, además, predominaron los asuntos aprobados por unanimidad. El presidente de la Diputación, Javier Moliner, puso en valor, precisamente, ese clima de acuerdos y garantizó que «no es casual que un gobierno provincial con mayoría absoluta busque el espacio de consenso e intentar que las cuentas públicas cuenten con el mayor consenso posible».
RESPONSABILIDAD/ Por su parte, el portavoz adjunto del PSPV, Antonio Lorenzo, quien defendió las posiciones socialistas tras la decisión de José Benlloch de no intervenir mientras se desarrollan las primarias en su partido en las que ha sido candidato, apeló, a la «responsabilidad» para explicar la abstención. Dijo que gobiernan «en más de 50 municipios», así como que las cuentas incluyen peticiones de su partido, y habló, en su justificación, de la forma en que se ha desarrollado el presupuesto del 2017, que ya «incorporó peticiones», como más dinero para el plan 135, o «eliminar la arbitrariedad en la gestión». También matizó que los presupuestos «no son» los que el PSPV-PSOE habría hecho.
En cuanto a Compromís, su portavoz, Xavier Trenco, explicó su voto en contra al criticar que «el equipo de gobierno está al servicio de los municipios del PP».
Desde Cs, Cristina Gabarda recordó que no están de acuerdo «en todo», pero dijo que la abstención se debe a que se han aceptado sus propuestas de elevar partidas para el desarrollo, la sensibilización social, ayudas a emprendedores y autónomos,; y fondos contra el acoso escolar, mientras que Iñaki Vallejo, de CSeM, culpó al PP de «gobernar desde el absolutismo».
CINCO EJES / El diputado de Promoción Económica, Salvador Aguilella desgranó las principales partidas de las cuentas del 2018, avanzadas ya por Javier Moliner, como informó Mediterráneo. Recordó como grandes ejes la igualdad de oportunidades, con 79,5 millones; la transparencia y eficiencia en la gestión, con 22,4; el impulso del territorio, con 16,8; y la divulgación del patrimonio, con 9,4 millones de euros.
Una cuestión que sí generó un cierto debate fue aprobación de la plantilla y relación de puestos de trabajo de la Diputación, que se produjo con los votos del PP, la abstención de PSPV y Ciudadanos, y el voto en contra de CSeM y Compromís. El visto bueno a las bases de las ayudas que concede la institución obtuvo menos oposición, solo la de estos últimos.
