Nadie ha quedado al margen de la crisis. Y lo que vendrá tras la pandemia será distinto a lo vivido hasta ahora. Esta guerra sui generis que se libra contra el coronavirus transformará para siempre las relaciones entre las personas, priorizará valores y cambiará la economía. Un momento extremadamente complejo y lleno de matices, en el que cada persona cuenta, y cuyas vivencias la Diputación de Castellón quiere guardar en el archivo provincial. Para ello, y a través del Servicio de Archivo, abrirá un formulario web a través del cual las personas interesadas pueden aportar sus testimonios en varios formatos.

Lo que pretende la Diputación con esta iniciativa es documentar y custodiar para la posterioridad las vivencias y experiencias personales y colectivas de los vecinos de Castellón durante el estado de confinamiento: cómo se han sentido, en qué o en quiénes se han apoyado, qué han aprendido... «El objetivo es que los castellonenses dejen su pequeña contribución a la historia de la provincia, porque lo que acontece hoy, mañana será historia», asegura Ruth Sanz, la diputada responsable del Archivo, que anima a todos los ciudadanos de la provincia a unirse a la iniciativa.

FOTOS, VIDEOS, DIBUJOS // En el archivo caben todo tipo de materiales, desde fotografías o vídeos a textos, audios, dibujos, relatos o diarios. «Lo único que pedimos es que sean documentos que evidencien la excepcionalidad del momento que vivimos», insiste la diputada provincial.

Un material que también podrá ser cedido a la Diputación, quien se compromete a conservar y preservar todos los documentos recibidos por parte de las familias, asociaciones o todo tipo de entidades de la provincia.

Además, y una vez realizado el trabajo, el objetivo es difundir el contenido histórico a través del portal del archivo y por las redes sociales. «No obstante, la idea se concretará más adelante, una vez se haya recopilado todo el material», sentencia Sanz.