La Diputación de Castellón aprobará en el pleno del próximo martes el Plan de cooperación provincial de obras y servicios del 2020, el denominado plan 135, una medida que permitirá distribuir a corto plazo más de 12,4 millones de euros entre los pueblos de la provincia para que puedan desarrollar aquellos proyectos a medio plazo destinados a la generación de actividad económica —algo más de nueve millones— y para que, además, dispongan de dinero para gasto corriente: 3,2 millones como aportación de la institución provincial.
El equipo de gobierno «ha hecho un gran esfuerzo para, pese a la situación de estado de alarma, agilizar los plazos respecto a otros años y aprobar un plan que supone un importante respaldo económico para los municipios», destaca el presidente de la Diputación, José Martí.
En la propuesta de acuerdo, que se llevará al pleno del día 7, recogen en el plan provincial de los citados 12,4 millones de euros, al que habrá que sumar las aportaciones de los municipios cifradas en unos 1,4 millones, entre el gasto en inversión real y el destinado a gasto corriente.
Otra mejora importante es que los ayuntamientos podrán quedarse con el dinero resultante de las bajas de adjudicación de las obras para destinarlo a gastos corrientes, con lo que se corrige la situación anterior que obligaba a devolver a las arcas de la Diputación una parte de los fondos inicialmente asignados.
MÁS PARA PUEBLOS PEQUEÑOS / Además, la Diputación de Castellón disminuye un 30% el importe que correspondería a los ocho municipios de más de 20.000 habitantes y un 2,2% las ayudas a los 12 municipios de entre 5.000 y 20.000 para beneficiar a 65 poblaciones de menos de 500 habitantes. Los 18 pueblos de menos de 100 habitantes recibirán un mínimo de 10.000 euros más que en el 2019 y las 47 localidades de entre 101 y 500 vecinos recibirán durante el ejercicio 5.000 euros más que en el año 2019, pasando de 65.000 a 70.000 euros como cantidad mínima.
