La Diputación de Castellón está en condiciones de prestar en 2017 aún mejores servicios y ayudar mejor a los ayuntamientos gracias a que sigue reduciendo sus costes financieros y estructurales año tras año desde que Javier Moliner asumió la presidencia. Este año, el gobierno provincial ha hecho otro ejercicio de eficacia en la gestión, lo que le ha permitido invertir más en los municipios y ayudarles a prestar más servicios a sus vecinos a pesar de haber destinado 14,3 millones de euros a reducir su deuda.

Así, se ha conseguido reducir su deuda en 2016 en un 22% después acometer la amortización de 14,3 millones de euros durante el presente ejercicio, pasando de 73,5 millones a 59,2 millones en un solo año, y mejorar así el excelente estado de salud financiera que presenta la administración provincial y que vienen mejorando año tras año. Todo ello redunda en poder responder de forma más eficiente a las necesidades de todos los castellonenses a pesar de haber tenido que asumir inversiones que son competencia de la Generalitat.

El diputado de Hacienda, Salvador Aguilella, ha subrayado que esta última amortización, posible "gracias al gran trabajo que se está realizando en esta casa por parte de todos y a la capacidad de gestión económica que viene demostrando el Gobierno Provincial desde que Moliner asumió la presidencia, nos permite liberar recursos a través de la disminución paulatina de la deuda con los bancos para destinarlos a lo que de verdad importa, los castellonenses”.