Las diferencias políticas se diluyen, al menos en el trazo grueso, cuando se pregunta a los diputados por Castellón en el Congreso en qué reivindicaciones para la provincia centrarán su trabajo en la legislatura que apenas ha iniciado su andadura, tras dos procesos electorales y casi un año de bloqueo institucional.

Las infraestructuras pendientes, esas que también reclama la sociedad civil, tal y como ha publicado Mediterráneo --AVE, Corredor, N-340, N-232, accesos sur al puerto de Castellón, Cercanías...--, forman parte de los tres bloques prioritarios para los parlamentarios del PP, Miguel Barrachina y Óscar Clavell; la de Compromís, Marta Sorlí; el socialista Artemi Rallo y, por último, Sandra Julià, de Ciudadanos, única que se estrena en Madrid, al sustituir a su predecesor, Domingo Lorenzo, quien fue elegido en los dos comicios generales y ha dejado recientemente la política.

Quedan fijados aquí también compromisos sobre una de las cuestiones troncales del trabajo institucional y parlamentario a partir de ahora y es la reforma del sistema de financiación, con el objetivo de mejorarlo, pero también la exigencia de políticas que fomenten la creación de empleo, el apoyo a los sectores productivos castellonenses como la cerámica o el turismo, y también alcanzar pactos de Estado por la educación o por la igualdad.