Los directores de Castellón califican como un «error» la huelga de deberes prevista por los padres para los cuatro fines de semana del mes de noviembre. Mientras se reactiva la campaña nacional en contra de las tareas en casa, lanzada por la Confederación Nacional de AMPA (Ceapa) y apoyada en Castellón por la FAPA, los profesores claman contra lo que tildan de «conflicto» que se podría «solucionar sin medidas tan drásticas como un plante, tales como sentarse con el tutor o plantearlo en el consejo escolar, que son instrumentos para el diálogo».

Alejandro Badenes, portavoz de los directores de Primaria de Castellón, explica que “hoy por hoy, los deberes no son obligatorios ni cuentan en los criterios de evaluación, y en la mayoría de ocasiones, los alumnos se llevan a casa lo que no han podido terminar en el aula, donde tienen su espacio; o son lecturas de libros, pero cada vez menos».

«MUY CONCIENCIADOS» // Badenes, que apela a la libertad de cátedra de cada profesor, asegura que los docentes están «muy concienciados». Y, si los lunes de noviembre, los alumnos que hagan brazos caídos de deberes no llevan las tareas encomendadas los viernes, «no pasará nada». «Ya no hay represalias por esto», dijo, aunque determinó que «hay profesores y alumnos para todo».

FAPA Castelló ha avanzado ya que se hará un modelo de justificante para aquellos padres que estén en contra de que los niños se lleven deberes a casa y quieran participar en el veto lanzado este noviembre. El objetivo del plan: acabar totalmente con las tareas, según la campaña, a nivel nacional, En la escuela falta una asignatura: Mi tiempo libre.

RACIONALIZACIÓN // «Se está en el camino de la racionalización de las tareas, por la conciliación de los niños con su tiempo libre», apostilla el portavoz de los directores, que coinciden en que «en casa, hay que repasar lo que se ha dado en clase, trabajos o lecturas, y pocos deberes». «Una hora máximo», puntualiza Badenes. H