Dirigentes municipales de Compromís en municipios de la provincia de Castellón con gran arraigo del parany reclaman que esta tradición tenga un marco legal y apuestan por encontrar una solución dialogada para que esta práctica cinegética salga de la clandestinidad tras 14 años de ilegalidad. De este modo, concejales y portavoces de esta formación se posicionan a favor de que el parany cuente con un respaldo normativo, justo ahora que la Conselleria ha remitido a la asociación de paranyers Apaval su respuesta acerca de la petición formulada para realizar pruebas de campo cara a homologar el cesto malla, la última esperanza de los aficionados.

Fuentes del departamento de Medio Ambiente aseguraron que la notificación salió ayer de la Conselleria, por lo que Apaval lo recibirá en los próximos días. Como avanzó Mediterráneo, el Gobierno autonómico considera que falta información en toda la documentación presentada por los aficionados para realizar el trabajo de campo, a partir del próximo día 12. De momento, desde Medio Ambiente guardan silencio, pero se antoja que la respuesta no será del agrado de los paranyers, quienes ya han anunciado que recurrirán a la vía judicial y se movilizarán en la calle si se les deniegan los permisos.

en defensa // Ante esta situación, representantes de Compromís defienden esta tradición. Y es que la consellera de Medio Ambiente, Elena Cebrián, fue propuesta por el sector verde de este partido. De todos modos, apuntan a que el problema se arrastra desde hace años «porque el PP, en su momento, no supo defender el parany dentro de las excepciones de las directrices europeas, como sí hicieron otros países».

Entre los más contundentes en su defensa están el alcalde de Betxí, Alfred Remolar, y el concejal y primer teniente de alcalde de Vila-real, Xavier Ochando. «Hay que buscar un marco legal para que los aficionados tengan unas normas y no prohibir nada», apuntó el primer edil.

En esta misma línea, Ochando, quien recordó la gran labor de defensa que realizó el fallecido Pasqual Batalla, remarcó que los aficionados quieren una regulación. «Estamos al lado de esta tradición de gente humilde, porque otro tipo de caza, con perdigones y en los cotos, no tiene trabas».

Por su parte, el primer teniente de alcalde de l’Alcora, Víctor Garcia, reconoció que resulta «complicado», con las directrices europeas encima de la mesa, encontrar un marco legal al parany, aunque apostó por seguir buscando posibilidades. «Una regulación es necesaria», apostilló. De igual modo, la primera teniente de alcalde de Almassora, Susanna Nicolau insistió en que los dirigentes deben «gobernar para las personas y buscar acuerdos».

purismo // Esta tradición también está muy presente en el Maestrat. El concejal de Medio Ambiente de Vinaròs, Jordi Moliner, va a más allá y apuesta por mantener la tradición del parany con el método de siempre, con reglas y controles. Más reacia a la legalización del parany se mostró la segunda teniente de alcalde de Benicarló, Marta Escudero, aunque reconoció que se trata de una práctica con un importante componente social en la comarca.