La intensa nevada, que no cesa en el interior, mantiene bloqueado toda la franja del interior de la provincia. Cortadas están esta mañana dos carreteras del interior de Castellón. Son la N-232, que sube a Morella, en dos tramos, del kilómetro 63 al 77,400 y el del antiguo trazado, del 71,500 al 83,500; y la CV-15, de la Pobla Tornesa a Vilafranca, con nivel máximo, el negro cerrada, del kilómetro 47 al 72, según fuentes de la Guardia Civil de Tráfico de Castellón.

Con cadenas para los turismos es preciso circular en 9 carreteras, cerradas a los camiones. En la misma N-232, del 46 al 63, en Morella, están en nivel rojo, lo mismo que en las comarcales CV-110 que conectan con Herbés; la CV-111, de Morella a Villabona; CV-122 de la Todolella; la CV-124 de Cinctorres; CV-169 de Benafigos; CV-170 en Vistabella; y más hacia el sur, la N-234 que atraviesa Barracas, del 57,500 al 63,600; y la A-23, del 47 al 62.400 de Viver a Barracas.

Si quiere consultar el estado de las carreteras, pinche aquí.

DISPOSITIVO ESPECIAL //

El Consorcio Provincial de Bomberos ha reactivado desde las 7.00 horas su dispositivo especial de nevadas en Castellón, iniciando de buena mañana la limpieza de los accesos a Morella, una de las zonas más complicadas por la nevada, que no cesa.