La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, ha afirmado que la inversión municipal en protección social se ha duplicado en los últimos tres años y, además, se sitúa ya entorno a los 12 millones de euros.

En 2014, el último ejercicio con un presupuesto gestionado íntegramente por el PP, el gasto en Servicios Sociales era de 6,4 millones de euros, mientras que este año se han superado los 11,5 millones.

«Los gobiernos tienen que demostrar la sensibilidad social con hechos y el Ayuntamiento de Castellón lo está demostrando de forma clarísima, porque es un aspecto esencial del gobierno municipal y así consta en el Pacte del Grau», ha explicado Marco. Las propuestas de Bienestar Social constituyen el primer bloque del documento político que sustenta la gobernabilidad municipal y han centrado el principal esfuerzo en los últimos dos años.

Marco ha asegurado que «es mucho aún lo que queda por hacer» y asegura que en 2018 se mantendrá el esfuerzo presupuestario, porque «la mejor inversión es la que se hace para mejorar la vida de una ciudad y de quienes la habitan». «El cambio se nota en todos los aspectos de la política municipal, pero en este caso es donde se aprecia mejor el talante de este gobierno y su vocación de trabajar para aquellos que tienen menos oportunidades», ha comentado.

También ha recordado que el déficit de financiación estatal condiciona el desarrollo de las políticas sociales. «Si el Gobierno central aportara la Comunitat Valenciana lo que le corresponde por población, Castellón recibiría 44 millones de euros anuales para proyectos de empleo, vivienda, educación y sanidad», ha destacado la primera edila.