La Conselleria de Educación concretó ayer una nueva orden que desarrolla el régimen de conciertos educativos y regula el sistema de pago delegado de los centros. Fue a través del Diari Oficial, en el que supone es «la primera normativa única al respecto», según fuentes de la cartera que dirige Vicent Marzà, y que regula uno de los sectores que, previsiblemente, serán punta de lanza en la campaña electoral a la Generalitat tras convocar este año la renovación de los conciertos escolares en Educación Primaria.

El texto, de 21 páginas, especifica temas como las ratios en las aulas, «que serán las que establezca la normativa vigente»; los criterios de preferencia a la hora de concertar, o, en clave más económica, qué tipo de profesorado tendrá pago delegado --no directamente del Consell, como la mayoría de docentes--, y cómo se ordenarán las «25 horas lectivas» semanales, «aunque el personal preste sus servicios en más de un centro», como pasa en el caso de los que imparten Religión.

Sustituciones, obligatoriedad de pedir el certificado de delitos sexuales, o ayudas al comedor, entre otras, se regirán por iguales parámetros que la pública. La orden, además, exige la «gratuidad real de las enseñanzas concertadas». «No se podrá percibir contrapartida económica ni directa ni indirecta», reclama.