La Conselleria de Educación ha abierto varias vías para solventar los problemas de plazas en el Raval Universitari, después de la activación de una plataforma de afectados formada por una veintena de familias que este año tendrán que escolarizar a sus hijos de 3 años fuera del barrio. Fuentes de la cartera educativa señalaron ayer a Mediterráneo que “se están abriendo varias vías cara al futuro, todas aún embrionarias, y una de ellas es que se ha establecido un primer contacto con el Ministerio por el edificio del CUC” donde se ubica el colegio Vicent Marçà, ya que es propietario de la mitad.

Mientras los padres siguen recogiendo firmas y mantienen sus alegaciones, “Conselleria y Ayuntamiento miramos por la comunidad educativa del centro, por lo que este curso no habrá nueva línea”. “Se está estudiando opciones para cursos posteriores”, dicen. H