El vicepresidente ejecutivo de la Agencia Valenciana de la Innovación, Andrés Garcia Reche, destacó que Castellón tiene industria, como la cerámica, desde siempre «muy receptiva» a la innovación. En su alegato, García Reche consideró que el talento define a un país y aporta valor añadido a una empresa, que así compite mejor, puede ofrecer mejores sueldos y se eleva la renta per càpita. El experto apuntó que, en el camino hacia un cambio de modelo productivo, «se necesitan toneladas de materia gris. Contamos con excelentes investigadores, aunque son pocos. Nuestro país es el décimo en comunicaciones científicas».

García Reche enfatizó que la Agencia Valenciana de la Innovación, para la cual es clave más presupuesto, está impulsando comités donde se sientan científicos, empresas e institutos Tecnológicos, y se plantean problemas y soluciones, desde el conocimiento. «No se trata de conseguir un Silicon Valley en cada provincia, sino que tenemos la necesidad de que el conocimiento llegue al tejido productivo: cerámica, plásticos, turismo», dijo.