Entre las buenas noticias para Castellón que se desprenden de la Encuesta de Población Activa (EPA) del tercer trimestre del año, hecha pública este jueves, se encuentra la evolución entre junio y septiembre del empleo femenino, con un avance sustancialmente mayor que el de los varones, aunque la brecha en favor de estos últimos sigue profunda.

Las cifras dicen que, de los 33.500 desempleados de la provincia, el 64% son mujeres, al sumar 19.800, lo que representa 4.400 menos que tres meses antes, mientras que en el caso de los hombres, la reducción se limita a 1.800 personas. Precisamente el inicio de las contrataciones en los almacenes de cítricos castellonenses, dado el comienzo ya en septiembre de la campaña citrícola, podría estar detrás de un avance que matiza, pero mantiene una enorme diferencia de género, ya que, según la EPA, más de cada seis individuos que buscan un trabajo son féminas.

el contraste

A pesar del sensible incremento en el número de ocupados y la caída del paro en la provincia, la Encuesta de Población Activa plantea realidades menos halagüeñas, como el aumento del número de hogares en los que ninguno de sus integrantes cuentan con ingresos.

Al cierre del tercer trimestre de este año eran 10.600, un total de 700 más que los contabilizados en esa situación doce meses antes, en el 2018, evolución interanual que rompe la expectativa a la baja de los últimos tres meses tras la subida hasta junio.

Esa cifra de 10.600 familias sin ingresos supone el 14% de la 77.300 viviendas en las que no reside ningún ocupado, de las que la mayor parte se correspondería con personas que perciben algún tipo de pensión o subsidio.