Los empresarios acusados de haber financiado ilegalmente al PPCV en la etapa de Francisco Camps como presidente del Consell han declarado este martes ante el juez de la Audiencia Nacional, ante el que han admitido esa práctica, que ya confesaron en febrero del año pasado en un pacto con la Fiscalía Anticorrupción con el fin de eludir la cárcel. La fiscal Miriam Segura, ya anunció este lunes, en la primera sesión del macro juicio de las piezas valencianas de la trama Gürtel, su disposición a rebajar las penas de los nueve empresarios encausados, precisamente, por su colaboración con la justicia.

A continuación, es el turno de prestar declaración del cabecilla de la red corrupta, Francisco Correa, mientras que no está confirmado el orden para hacerlo del resto de los acusados.

Esta segunda jornada de la vista oral se produce después de que el juez rechazara a última hora del lunes in voce las peticiones de la cúpula del PPCV de Camps, con el exsecretario general del PPCV, Ricardo Costa, y el exvicepresidente del Consell, Vicente Rambla, a la cabeza de sobreseer la causa con el argumento de que los delitos de los que se les acusa han prescrito, y que incluyen por financiación irregular de actos de campañas electorales de 2007 y 2008 pagados a la trama Gürtel con dinero B obtenido de comisiones de una decena de empresarios.

Veinte acusados se sentarán al menos hasta abril en el banquillo por estos hechos -que engloba tres piezas de la rama valenciana de Gürtel-, de los que cinco fueron cargos del PP valenciano, seis son integrantes de la trama Gürtel y nueve son empresarios.